
Panamá amplía por tres días permiso a Martinelli para salir al exilio en Nicaragua

El gobierno de Panamá extendió este lunes por tres días el permiso que otorgó al expresidente panameño Ricardo Martinelli para que viaje al exilio en Nicaragua, luego de que Managua se negara a recibirlo sin tener garantías de que no tiene una orden de captura de Interpol.
El magnate de 73 años que gobernó Panamá de 2009 a 2014 tenía previsto salir antes de la medianoche de este lunes -cuando vencía el salvoconducto- de la embajada de Nicaragua, donde se refugió el 7 de febrero de 2024 para eludir una condena casi 11 años de cárcel por lavado de dinero.
Cuatro horas antes de que expirara el permiso, el gobierno panameño amplió su vigencia hasta el jueves para superar la crisis diplomática desatada con Nicaragua. Aseguró que la alerta roja pedida por la jueza que condenó a Martinelli "fue rechazada por improcedente" por ser un asilado.
Rosario Murillo, copresidenta nicaragüense junto a su esposo Daniel Ortega, exigió a las autoridades panameñas garantías de que no pidieron a Interpol la orden de captura y denunció una posible "emboscada". "Pareciera una trampa legal", dijo.
La polémica estalló el domingo cuando la Policía de Panamá reveló que había en trámite "una alerta de Interpol", pero luego la misma institución y el gobierno señalaron que prevalecía el salvoconducto por la condición de asilado que le dio Nicaragua.
"Mientras ellos no resuelvan esta incongruencia, no podemos (...) aceptar lo que consideramos una emboscada" contra Martinelli y el Estado nicaragüense, afirmó no obstante Murillo.
El analista político Danilo Toro estimó que Nicaragua está usando a Martinelli como "ficha de cambio" para obtener el apoyo de Panamá en foros internacionales.
El presidente de Panamá, José Raúl Mulino, es amigo de Martinelli pero se ha quejado del activismo político que ha mantenido el asilado desde su refugio. El jueves le concedió el salvoconducto por razones "humanitarias" para que atienda problemas de salud, dijo.
- Desde el jacuzzi y la hamaca -
En sus redes sociales, el exgobernante y dueño de una cadena de supermercados, se despidió el fin de semana de sus seguidores y reiteró que es "inocente" y víctima de "persecución política".
Se lo halló culpable en 2023 de utilizar fondos públicos para adquirir un grupo de medios de comunicación. También está imputado, en un juicio programado para noviembre, por el escándalo de sobornos de la constructora brasileña Odebrecht.
Cuando se asiló, Martinelli era favorito para ganar un segundo mandato en los comicios de mayo de 2024, pero la justicia lo inhabilitó políticamente y designó en su lugar como candidato a Mulino, ministro de Seguridad en su gobierno.
Desde la embajada hizo campaña electoral en favor de Mulino, que ganó impulsado por la popularidad que tiene Martinelli en un sector de la población que le atribuye un auge económico durante los años en que gobernó.
Amante de la polémica, en su refugio ha recibido constantes visitas de políticos amigos y ha publicado videos haciendo ejercicio, asados o mientras se somete a tratamiento por el dentista.
Sus selfis tumbado en una hamaca o entre las burbujas de un jacuzzi fueron virales. Y hasta su perro Bruno estuvo cómodo en la sede diplomática, que fue ampliada y acondicionada especialmente para el asilado.
Nicaragua, bajo el gobierno de Ortega y Murillo, ha dado refugio en los últimos años a extranjeros acusados de corrupción, entre ellos los expresidentes salvadoreños Mauricio Funes -ya fallecido- y Salvador Sánchez Cerén.
"Los Ortega-Murillo convirtieron al país en refugio de delincuentes de saco y corbata que tienen muchísimo dinero para blindarse comprando la nacionalidad nicaragüense y la protección del régimen", afirmó a la AFP la exguerrillera nicaragüense Dora María Téllez, exiliada en España.
Tras concluir su mandato en 2014, Martinelli se juramentó en el Parlamento Centroamericano, pese a que dijo que era una "cueva de ladrones" donde los expresidentes de la región buscaban inmunidad.
Por casos de corrupción dos de sus hijos cumplieron condenas en Estados Unidos, donde Martinelli y su familia tienen prohibida la entrada.
N.Johns--TNT